Mostrando entradas con la etiqueta EEUU. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta EEUU. Mostrar todas las entradas

lunes, 27 de febrero de 2012

El factor precio


Durante los años setenta y ochenta del pasado siglo, principalmente a consecuencia del continuo incremento del precio de las entradas, en entre otros motivos, las salas de proyección españolas vieron disminuidos sus ingresos debido al espaldarazo que sufrió el cine por parte del público, que empezó a tener otras cosas mejores que hacer con el mismo o menos dinero para pasar la tarde.

Hoy más de treinta años después y pese a que las alternativas siguen aumentando, no es precisamente la diversidad de nuevas formas de entretenimiento existentes lo que merma el número de espectadores en las salas, incomprensiblemente continua siendo su elevado coste. Desde el año 2001 no ha dejado de bajar el número de asistentes al cine y se han perdido en esta última década alrededor de 40 millones de espectadores.

Un estudio de la consultora Media Salles de 2006 demostró que Italia, Portugal y España, aparentemente con las entradas de cine mas baratas de la Unión Europea, eran en realidad los países más caros en este sentido, debido a aunque en otros se pague más por lo mismo, también es sustancialmente mayor el salario percibido a final de mes por cada ciudadano o potencial espectador.

La subida de precios, por encima de la inflación, como esta ocurriendo en España, ya existía en otros lugares para contrarrestar la debacle del séptimo arte en cuanto a la frecuentación de salas, de modo que se amortiguaba gran parte del golpe producido por la bajada o mejor dicho de la caída en picado del número de espectadores.

Pero en estos lugares ya se han dado cuenta de que esa estrategia significaba pan para hoy y hambre para mañana, ya que la subida continuada del precio de la entrada perjudicaba la demanda y tan sólo beneficiaba a un selecto grupo de films.

Por ello EEUU ha aplicado una estrategia de contención, por la que el precio medio de las entradas ha subido un 53% en veinte años, pero en términos reales ha permanecido estancado durante bastante tiempo, y sólo con la llegada del 3D ha experimentado una subida mayor. 

De esta manera cuesta lo mismo una entrada de cine en España que en EEUU, siendo el nivel de vida norteamericano mucho más elevado que el español.

En otros países como Francia esta política de contención ha posibilitado sin duda que sobrevivan hasta el momento numerosos cines en todo el territorio nacional, llegando el pasado año ha conseguir un récord de venta de entradas (215,6 millones).

Por todo lo dicho anteriormente creemos que España debería seguir el camino de los países citados más arriba, países que por otro lado nos llevan unas cuantas décadas en cuanto a estos temas que debatimos, y que no tienen aparentemente un pelo de tontos, como para andar dejando de percibir beneficios con estos modelos. De no ser así cada vez nuestro sector cinematográfico pasará a estar más cerca de engrosar el listado de sectores en crisis en nuestro país.

Miguel Pastor

Bibliografía:

lunes, 13 de febrero de 2012

Algunas leyes del mundo

Ya son muchos los países en los cuales se han impuesto leyes para frenar la piratería, pero esas leyes, pese a tener el mismo objetivo, pueden llegar a ser muy diferentes. Entonces, mi pregunta es ¿qué ley es más correcta?
En EEUU, por ejemplo, existe una ley que prohíbe la distribución y descarga de todo material protegido por derechos de autor (Digital Millenium Copyright Act).  Las discográficas se encargan de vigilar a los infractores y les ralentizan la conexión. Eso es lo que dice la teoría, en la práctica es diferente. Por poner un ejemplo, en Minnesota  un juzgado condenó a una internauta a pagar 1,4 millones de euros, por descargar 24 archivos.
En el Reino Unido, la ley de Economía Digital da 3 avisos al usuario antes de ralentizar la conexión. Una ley mucho más permisiva.
En Alemania, en 2006 se aprobó una ley con penas de hasta dos años de prisión por descargas para uso personal, y cinco si hay lucro. Con esta ley el número de descargas ha disminuido un 19% en 2010.
Y ya en España, la ley Sinde ha desatado una guerra entre creadores (industria) e internautas (piratas). Existen diversas opiniones sobre si esta ley entrará en vigor en Marzo de este año o no. A pesar de todo, lo cierto es que mientras en el resto de países punteros tienen ya sus leyes en marcha, España no consta de ninguna restricción contra la piratería. 
¿Creéis que debería seguir así, sin ley? Y por otro lado, con la excusa de proteger los derechos de autor, ¿no es una forma de comercializar un medio que prácticamente desde su nacimiento ha sido libre? Personalmente, pienso que se debería respetar y pagar el trabajo realizado por otros. Aunque por el contrario, creo que esto es una artimaña de los gobiernos con la que buscan únicamente el lucro.
-Luis Valverde-